Manifiestos

¿Ha muerto el Surrealismo?

Se anunciaban como la voz máxima de la Libertad. ¿A dónde fue a parar el surrealismo?, ¿fueron convertidos en costosas piezas de colección para los grandes almacenes del arte moderno en el mundo, donde claudicaron a su independencia?, ¿capitularon a la hora de tomar por asalto al establishment?, ¿los herejes, fueron domesticados?, ¿Dalí emplazó a Bretón?, ¿se perdieron en la gula comercial?, he aquí quizás algunas pistas para saber cómo acabo todo aquello (o, en todo caso, cómo terminaron confinados a ser simples consultas académicas para las Bibliotecas, alejados así de sus principios fundacionales de 1924):

Desde 1914, Nueva York ha sido el punto de encuentro de Picabia, Marcel Duchamp y Man Ray -fundador de la revista New York Dada en 1921- antes de unirse a André Bretón, Louis Aragón, Philippe Soupault, Paul Eluard y Tristan Tzara. Al acoger en sus salas la exposición del Surrealismo en los años treinta, la galería Julian Levy influenciará a numerosos artistas americanos y, en 1936, el Museo de Arte Moderno de Nueva York organizará la primera gran exposición, titulada Fantastic Art, Dada, Surrealism, mientras que los propios surrealistas organizarán la Exposición Internacional de Londres. (Para muchos americanos, serán sobre todo las performances y payasadas comerciales de Salvador Dalí las que representen a un surrealismo para escaparates de grandes almacenes, llamativo y rápidamente pasado de moda.) (....)

Los Surrealistas, obligados por el "deber de discreción" de los refugiados, deben mantener en cuarentena los principios revolucionarios de su movimiento y sus reinvindicaciones sociales y antirreligiosas mientras permanezca en Estados Unidos. Quizás esto explique por qué en este país, mucho antes que en Europa, el surrealismo se convertiría en estatua de cera de museo o en atractiva (pero inofensiva) especialidad de los programas universitarios". Surrealismo ahora y siempre!!. (del libro:" ¿Qué hay de nuevo, viejo?", del Grupo Surrealista de Chicago, Pag. 5 y 7).