miércoles, noviembre 08, 2006

ELLA CANTABA BOLEROS (II)



en el bolero, el pensamiento es el cuerpo”.
Oscar Collazos

Lugar común de los amores y desvergüenza pública aceptada, del Bolero nace todo y el baile es una antesala de lo que vendrá después. Dicen quienes la bailan que lo mejor del bolero (como buen tributo de Eros) es la complicidad, la cadencia de la cadera de la mujer invitada, el susurro sin medias tintas , el taco de punta que se levanta, los sudores fríos de uno y de otro, y como no, la invitación a la lujuria y luego, y luego quizás la odisea de besos y arrumacos entre sábanas y edredón que acoge la bravura de los cuerpos.

Mucha uña se ha metido al bolero, la literatura le ha rendido tributo, el cine se ha metido en su alcoba, las cantinas y los prostíbulos lo tienen en la memoria y todo lo bueno que se tiene en la memoria se tiene en un altar, así sea una casa de putas y así hayan corrido ríos de semen, fluidos vaginales, noches enteras de soledades, crónicas de desengaños y como no, venas que se desangraron pidiendo chepa.